P. ¿Por qué recomendarías la EPJ del ICAB?

R. Yo creo que la EPJ es realmente donde se puede aprender nuestro oficio. En las clases de la Escuela de Práctica Jurídica se parte de que los profesores son abogados y abogadas y, por eso, no se tiene en cuenta sólo el aspecto teórico, sino también el aspecto procesal, la estrategia a seguir en un caso, la relación con los clientes, los honorarios... Aspectos que en la carrera no se tocan. Es una escuela de práctica en Derecho de principio a fin.

P. Como profesor de la EPJ durante muchos años, ¿cómo ha cambiado la profesión y el alumnado de la Escuela?

R. La profesión ha cambiado en aspectos tecnológicos, sobre todo. Ahora es más fácil comunicarte con un juzgado y el juicio puede hacerse desde cualquier sitio, lo que supone una ventaja. Por otra parte, el mundo de la justicia por lo general ha perdido un poco la solemnidad de antes. Cuando ves a abogados explicando casos que han ganado en plataformas como TikTok, a mí personalmente no me gusta, lo veo ordinario, pero quizás son signos del tiempo.

P. ¿Qué diferencia ves entre el Máster de Acceso y la EPJ?

R. El Máster de Acceso tiene como finalidad aprobar un examen para poder colegiarse como abogado/a. El Máster de Acceso es necesario, ya que antes terminabas la carrera y te colegiabas y, al día siguiente, podías ir al Tribunal Supremo. El Máster es como un resumen del Grado de Derecho. Pero donde aprendes las cuestiones prácticas es en la EPJ. Yo, particularmente, veo más útil la Escuela de Práctica Jurídica que un Máster de Especialización, ya que la práctica debe vivirse.

P. ¿Cómo valorarías el programa del Alumni EPJ?

R. Me encanta. Creo que las relaciones sociales forman parte esencial de nuestra profesión. Para ser abogado o abogada, debe gustarte la gente. En el Alumni EPJ tienes la posibilidad de estar "macerado" en tu profesión, con tus compañeros y compañeras y, de paso, disfrutar y divertirte mientras haces networking.